Se calló la poesía y sobrevino
un silencio inmortal.
Lo que ayer era un refugio
ahora no es más que una cárcel.
Censura de sentimientos
lenguaje que no es lenguaje.
Vagas palabras,
cerebros secos,
custodios de sal
vienen a desahuciarnos
del lugar que escogimos para huir.